sábado, 29 de octubre de 2011

El drama de cinco millones de personas

España sigue sufriendo los efectos devastadores de una crisis económica que parece no tener fin. Con un estado español cada día mas endeudado, se une los datos arrojados por la “Encuesta de población activa” del tercer trimestre del año 2011. En ella se refleja que el desempleo se incrementa en 144.700 personas, hasta marcar una nueva cifra récord en el número total de desempleados en 4.978.300 afectados. De este modo, la tasa se eleva en seis décimas y se coloca en el 21,52%, frente al 20,89% del trimestre anterior. Se trata de la tasa de paro más elevada desde el cuarto trimestre de 1996, cuando alcanzó el 21,60%.
Estamos en un momento crítico para el mercado laboral, y es que, hay que remontarse hasta la última gran crisis que sufrió el estado español para encontrar datos de desempleo similares a los actuales. Circunstancias del destino hace que el cambio de gobierno que se produjo en ese año de 1996, vuelva, todo parece indicar,  a repetirse en la misma dirección en las próximas elecciones.


Lo más preocupante es que estos datos se refieren al trimestre estival, donde se produce un aumento del trabajo temporal provocado por la necesidad de mano de obra relacionado con el turismo veraniego. Tradicionalmente, las EPA de años anteriores, presentaba un aumento de los índices de desempleados en el último trimestre del año, debido a la destrucción de este trabajo temporal. Ante lo cual, solo podemos esperar que en el trimestre próximo de este año, el número de desempleados aumente.
Pero si hay un dato que enseña el rostro de la tragedia que esconde estas estadisticas, es  el de las familias donde ninguno de sus miembros trabaja, superando todos los registros en la historia moderna de España. Hace cuatro años sólo 400.000 hogares tenían todos sus miembros en paro; ahora son 1,4 millones hogares.

¿Qué futuro nos aguarda?

Zapatero abandona el barco el próximo 20 de noviembre. Rubalcaba y Rajoy en pocos dias empezaran sus respectivas campañas políticas, donde comenzaran a lanzarse dardos políticos del porqué deben votar su propuesta política y no la del otro partido. Mientras ellos se dedicaran a sacar a relucir sus habilidades de persuasión, millones de españoles miraran con preocupación cómo le asedian con cartas de impagos, no pueden hacer frente a sus deudas y como la búsqueda de empleo no tiene frutos. Desde distintos sectores de la población, se espera con impaciencia la entrada de un nuevo gobierno, pues esperan, no el fin de esta crisis, pero si una reducción de estas cifras records. Pero esta crisis, ni se soluciona con un nuevo gobierno ni es provocada por la gestión de Zapatero ni tampoco de Aznar y de su famosa “Ley del Suelo”. La verdadera razón de que actualmente estemos en esta situación hay que buscarla en la esencia del capitalismo. Sistema que se nos ha impuesto como el verdadero y único modelo económico, y al cual no hay alternativa posible.


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